Andar con jóvenes apuntando al corazón de las imágenes, es como salir a cazar arco iris en la brevedad de los paisajes posibles, bonitos, probables, es como adivinar que en la próxima esquina encontraremos el rostro sonriente de alguien que necesita ser fotografiado por el lente osado de un muchacho con ganas de crecer.
Esa ha sido la parte importante de este taller de fotografía que estamos construyendo desde la frescura de los jóvenes, un taller para encontrarse con la imagen capturada por las palabras y hechas prisioneras por el talento creativo de un muchacho que ve en su cámara la amiga necesaria que le satisface la curiosa prontitud del tiempo y el espacio.
Aprender el valor de su cámara, aprender a querer todo lo que existe delante de su lente y aprender a embellecer esa parte maravillosa de la mirada, es el objetivo de un taller donde se buscan amigos con quien compartir la maravillosa sensación de hacer de la imagen la última palabra de la visión.
Los muchachos y muchachas se han comprometido con la hora exacta en que se encontrarán con un aprendizaje que les va a permitir sentir amor por lo que son capaces de hacer con esa pequeña cajita de sorpresa que les sirve para esconder los secretos mas bonitos del próximo paisaje y del plano mas espectacular del sol que les sonríe desde lo alto del horizonte magnifico de los colores.
Hola buenas tardes, me gustaria participar en un taller de fotografia, como podria hacer? espero su pronta respuesta saludos
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